El Camino de Santiago y el juego de la oca están estrechamente relacionados: muchos historiadores creen que el tablero del juego es una metáfora del propio Camino.
Las casillas representan etapas del peregrinaje, con “ocas” que simbolizan puntos seguros o de descanso (hospitales, monasterios) y casillas negativas como el pozo o la cárcel que evocan peligros y obstáculos reales del viaje medieval.
El recorrido circular del juego, con su meta en la última casilla, sería una versión lúdica del viaje espiritual y físico hacia Santiago de Compostela
Publicar un comentario